Investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) han desarrollado un innovador implante médico que puede proteger a las personas con diabetes tipo 1 de peligrosas bajadas de azúcar en sangre durante emergencias, una afección conocida como hipoglucemia. El pequeño implante impreso en 3D contiene la hormona glucagón, que se libera automáticamente en el organismo cuando es necesario.
La diabetes es una de las enfermedades crónicas más comunes en todo el mundo. De acuerdo con datos de la Federación Internacional de Diabetes (FID), uno de cada diez adultos (537 millones) en el mundo vive con diabetes. Las personas con diabetes tipo 1, cuyos cuerpos ya no producen su propia insulina, corren un riesgo especial de desarrollar hipoglucemia. Esto ocurre cuando los niveles de azúcar en sangre bajan demasiado. En casos graves, puede provocar convulsiones, pérdida del conocimiento o incluso la muerte.
El nuevo implante se puede conectar a un medidor de glucosa (Crédito de la foto: USA Today)
Un día típico en la vida de una persona con diabetes tipo 1
Las personas con diabetes tipo 1 deben inyectarse insulina todos los días para mantener estables sus niveles de azúcar en la sangre. Sin embargo, en algunos casos, esto puede provocar hipoglucemia. Cuando eso ocurre, normalmente hay que inyectar glucagón para estimular al hígado a liberar glucosa en el torrente sanguíneo. Pero no todos los pacientes reconocen a tiempo los signos de alerta.
«Algunos pacientes pueden sentir cuando les baja el azúcar en sangre y van a comer algo o se administran glucagón», explica el profesor Daniel Anderson, del MIT. «Pero otros no son conscientes de que están hipoglucémicos y pueden caer en estado de desorientación, o incluso, en coma. Esto también es un problema cuando los pacientes duermen, ya que dependen de las alarmas de los sensores de glucosa para despertarse cuando el azúcar baja a niveles peligrosamente bajos». Aquí es donde entra en juego el nuevo implante. Se coloca bajo la piel y actúa como una especie de depósito de medicación. En caso de necesidad, puede liberar glucagón automáticamente, ya sea a través de un monitor de glucosa en sangre conectado o mediante activación manual.
La inyección de insulina puede provocar hipoglucemia (Créditos de la foto: Getty Images)
Un vistazo más de cerca al implante impreso en 3D
La estructura, del tamaño aproximado de una moneda de veinte céntimos, se desarrolló utilizando polímeros impresos en 3D. En su interior hay un depósito protegido por una aleación con memoria de forma compuesta por níquel y titanio. Esta aleación especial cambia de forma a unos 40 grados centígrados, lo que permite la liberación del medicamento. Dado que el glucagón en su forma natural solo permanece estable en el organismo durante un breve periodo de tiempo, los investigadores desarrollaron una versión en polvo estable de la hormona que puede almacenarse en el depósito durante periodos prolongados. Cada implante puede contener hasta cuatro dosis.
«Nuestro objetivo era crear un dispositivo que estuviera siempre listo para proteger a los pacientes de la hipoglucemia. Creemos que esto también puede ayudar a aliviar el miedo a la hipoglucemia que sufren muchos pacientes y sus padres», destaca Anderson. El implante podría ser especialmente útil para los niños que no pueden ponerse una inyección en caso de emergencia. También podría tratar automáticamente la hipoglucemia nocturna.