Investigadores han desarrollado un tratamiento contra el cáncer con ayuda de la impresión 3D

Según la Organización Mundial de la Salud, las estimaciones para 2022 muestran un aumento alarmante del número de casos de cáncer, con 20 millones de nuevos casos y 9,7 millones de muertes registradas, el doble que en 2020. De hecho, el cáncer es la segunda causa de muerte en el mundo. A pesar de los constantes avances en la investigación de tratamientos, la búsqueda de una cura sigue siendo un desafío mayor. Sin embargo, un estudio realizado por la Universidad de Australia Meridional ofrece una nueva esperanza en la lucha contra el cáncer, en particular, el cáncer de hígado y todo con ayuda de la impresión 3D.

Investigaciones recientes sugieren que los parches impresos en 3D que contienen fármacos podrían suponer un gran avance en el tratamiento del cáncer de hígado. No solo parecen matar más del 80% de las células cancerosas, sino que también reducen el riesgo de recaída y limitan los efectos secundarios de la quimioterapia tradicional. Este nuevo ángulo podría transformar la forma en que se trata esta enfermedad.

El parche impreso en 3D (créditos de la foto: University of South Australia).

Parches impresos en 3D: una revolución en el tratamiento del cáncer  

Los nuevos parches impresos en 3D, fabricados con geles que contienen fármacos contra el cáncer (quimioterapia), son una solución innovadora. Se colocan en el lugar preciso donde se ha extirpado quirúrgicamente el cáncer para así atacar las células cancerosas restantes. Estos parches también podrían reducir los efectos secundarios de la quimioterapia, como las náuseas. Aunque en un principio se han desarrollado para tratar el cáncer de hígado, también podrían ser útiles contra otros tipos de cáncer, como el de ovarios, de cerebro y de cuello. El equipo de investigación dio prioridad al estudio del cáncer de hígado por su naturaleza agresiva y su elevada tasa de mortalidad, con un riesgo de recaída de hasta el 70%.

Según la Dra. Souha Youssef, investigadora de la Universidad de Australia Meridional, los nuevos parches representan un gran avance en el tratamiento de esta enfermedad. «El principal protocolo de tratamiento requiere la extirpación quirúrgica del tumor seguida de quimioterapia, que, aunque es crucial para evitar recaídas, resulta muy difícil por sus efectos secundarios. Hay estadísticas sorprendentes que muestran cuántos pacientes deciden abandonar el tratamiento debido a su agresividad y cómo esto afecta a su calidad de vida». Gracias al uso de tecnologías avanzadas de impresión en 3D, los investigadores han podido personalizar los tratamientos para cada paciente, con resultados prometedores en la lucha contra el cáncer de hígado. Las pruebas de laboratorio han revelado una mayor tasa de respuesta tras el uso de estos tratamientos a medida.

El profesor Sanjay Garg, investigador principal del Centro de Innovación Farmacéutica de la misma universidad, destaca la importancia de los enfoques personalizados de tratamiento para mejorar los resultados de los pacientes con cáncer. Explica: «Dada la diversidad del cáncer, ya no basta con un enfoque único». Y añade: «Con las impresoras 3D, ahora tenemos la capacidad de adaptar los perfiles de administración de fármacos, personalizar la forma de las capas y ajustar los principios activos a las necesidades específicas de cada paciente, todo ello con solo pulsar un botón». Los investigadores están a punto de embarcarse en estudios preclínicos para determinar la asociación crítica entre el tamaño del tumor y el régimen ideal de dosificación y administración. Se trata de un paso crucial, ya que podría allanar el camino para posteriores ensayos clínicos.

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*Créditos de la foto de portada: Freepik