El fabricante austriaco Lithoz, dedicado al desarrollo de impresoras 3D y materiales cerámicos, ofrece tecnologías de fabricación aditiva tanto para principiantes como para la producción industrial en serie. Además de la CeraFab Lab L30, dirigida principalmente a los principiantes, su gama de productos también incluye la CeraFab Multi 2M30, la CeraFab System Medical S65, el CeraFab System S25, S65 y S230. Gracias a su tamaño compacto, la CeraFab Lab L30 no sólo es fácil de usar, sino que también ofrece al usuario una mayor rentabilidad. Sobre todo, esta impresora 3D es ideal para la producción de prototipos de cerámica y pequeñas series, ya que se considera una impresora muy fiable dentro de su clase. Se basa en la primera máquina CeraFab 7500 como desarrollo posterior. Esto significa que la CeraFab Lab L30 puede alcanzar la calidad de impresión que normalmente corresponde a la de los componentes fabricados de forma convencional.

Características de la CeraFab Lab L30

La impresora 3D CeraFab Lab L30 tiene un volumen de fabricación de 76 x 43 x 170 mm, mientras que su tamaño total es de 0,75 x 0,55 x 1,6 m y pesa 150 kg. La máquina, que se basa en la tecnología de fabricación LCM (Lithography-based Ceramic Manufacturing) de alta calidad, es compatible con materiales cerámicos y se lanzó en 2021. Con su capacidad de imprimir 100 capas por hora, un grosor de capa de 25 a 100 µm, y la salida automática de material, es ideal para introducirse en el ámbito de la fabricación aditiva de resina.

Ya sea en el ámbito médico, industrial, aeroespacial o aeronáutico; la CeraFab Lab L30 ofrece una operatividad intuitiva, de fácil maniobra en espacios reducidos, así como una calidad fiable a largo plazo. La impresora 3D es óptima a la hora de iniciarse en la impresión 3D cerámica. Con la impresora 3D de Lithoz experimentarás una libertad de diseño casi ilimitada del proceso LCM, que abre la puerta a nuevos mercados y aplicaciones. También existe la posibilidad de desarrollar y utilizar tus propios materiales.